Por: Iván Mastino /Financista 

Director de la Comisión de Asuntos Económicos de CAMCHI 

 

Actualmente nos encontramos ante un escenario turbulento de situaciones a nivel externo e interno.  Conflictos bélicos, guerra comercial entre Estados Unidos y China, inestabilidad en los mercados financieros, altas tasas de intereses y cambios en el orden económico mundial son solo algunos de ellos.

En Panamá la situación no es muy diferente; sin embargo el mayor desafío se encuentra en el manejo  económico, el cual deberá ser enfrentado con cautela,  cordura, sensatez y en pro del beneficio de la Nación por el próximo Presidente de la República y su equipo de trabajo.

Es un reto donde  la población estará observando como  fiscalizadora de las promesas de campaña y donde todos los panameños asumiremos una gran responsabilidad este 5 de mayo, para escoger la oferta electoral que la mayoría de los panameños decida como Nación soberana.

Entre los principales desafíos que tendrá el próximo Mandatario se destacan:

  1. Recuperar el grado de inversión: A más de 10 años que Panamá goza de un puesto privilegiado con niveles de riesgo país aceptables para los inversionistas, con un nivel de confianza óptimo, hoy vemos como una de las principales Calificadoras de Riesgos, nos hace un “downgrade” dada la situación fiscal actual, pobre crecimiento económico y temas de gobernabilidad. El nuevo Gobierno tiene el deber de generar políticas y estrategias económicas para lograr ganarse la confianza de los inversionistas y poder tener mejores días para Panamá.
  2. Manejo adecuado y transparente de las Finanzas Públicas: No hay nada que genere más confianza, que un manejo transparente de las Finanzas Públicas, con informes óptimos y fiel cumplimiento del presupuesto general del Estado, manteniendo los niveles de déficit fiscal dentro de lo que establece la Ley de Responsabilidad Social Fiscal.
  1. Manejo adecuado del endeudamiento público: Hay compromisos que pagar y se deben atender oportunamente. Uno de los grandes retos está el controlar el nivel de endeudamiento público, y planificar el flujo de capitales para inversiones que generen empleo y programas de financiamiento para las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas, y poder disminuir el nivel de informales que operan en Panamá.
  1. Manejo adecuado de los subsidios estatales en materia social: Los subsidios generan más pobreza. Es hora de una evaluación integral y en lugar de subsidiar, se debe enseñar a la población más vulnerable a ser productivos; la mayoría tenemos la capacidad de trabajar y aportar al país, vía tributos, en lugar de esperar qué hace el Estado por mí; y así dejar de ser una carga.
  1. Revisar y reformar la Ley de la CSS, para rescatar la institución: Urge una reingeniería de esta noble institución, para garantizar las jubilaciones y pensiones a esos hombres y mujeres que al final de la vida laboral puedan gozar de una pensión digna por el aporte a la productividad del país de más de tres décadas de trabajo.
  1. Velar por el fortalecimiento del Fondo de Ahorro de Panamá: Es un patrimonio que debemos cuidar, fortalecer y consolidar, tomando las mejores decisiones de inversión. Es un patrimonio de todos los panameños.
  1. Garantizar la institucionalidad y gobernanza apegada a la ley y a los mejores intereses del país: Si no se cuida la institucionalidad no puede haber crecimiento económico, ni flujo de capitales hacia Panamá.
  1. Incentivar la Inversión Extranjera: Hacer las cosas bien, con honestidad, transparencia, apegado a las leyes y en beneficio del país, envía un mensaje de confianza a los inversionistas que quieran venir a Panamá a hacer negocios.

Estos son los principales retos en materia económica, a los cuales se enfrentará el nuevo gobierno que elijamos en las urnas este 05 de mayo. Todos como ciudadanos tenemos el deber cívico de acudir de forma responsable a los centros de votación para hacer valer nuestro derecho.